Fox anuncia durante los Upfronts que cancela la serie Touch
Y sucedió lo que era de esperar, la cadena Fox ha anunciado la cancelación de la serie Touch, tras el final de su segunda temporada. El anuncio se produjo durante los Upfronts (evento en el que todas las cadenas muestran como será su parrilla televisiva para la próxima temporada).
Touch había lidiado con una bajada de la audiencia progresiva desde su estreno, sufrió un sospechoso retraso en el estreno mundial de la segunda temporada y además se produjo la salida de algunos actores como la actriz Maria Bello que decidió abandonar la serie a mitad de la segunda temporada, todos estos detalles fueron un motivo suficiente para Fox.
Del mismo modo, su protagonista Kiefer Sutherland anuncia que volverá a una nueva temporada de la que pensábamos cancelada y terminada 24. (Puedes leer la noticia completa sobre el regreso de 24 en este enlace).
Pero para mí, toda la culpa recae única y exclusivamente en su creador Tim Kring, que ha dilapidado de nuevo, un proyecto que tenía entre manos. Algo así como ocurrió con Heroes, su primera serie y que podía haberse convertido en una de las mejores series de la historia por su ingente potencial, pero que desde la segunda temporada no supo gestionar ese éxito y alargo la serie mediante tramas absurdas y desdibujadas, un auténtico desastre que ni la crítica ni el público toleró.
Tim Kring exprime sus argumentos para mostrar todas las cartas en la primera temporada, con ello consigue un producto sencillamente insuperable y espectacular que atrae la atención del público y por ende de los responsables de las cadenas, pero después la serie se desinfla y se viene a bajo por si misma, presentar toda la acción al principio tiene el riesgo de que después no sepas que mostrar a la audiencia.
Algo parecido le ocurrió a la serie Touch, un primer episodio espectacular, de los mejores que he visto en los últimos años, implicó que el resto de episodios fueran exactamente iguales, lo que convirtió a Touch en una especie de procedimental predecible donde todos los episodios eran una copia exacta del piloto (historias aparentemente independientes que terminan por cruzarse con un ritmo emotivo y una cadencia única) y ese truco, nadie lo tolera.
La serie cayó desde los 12 millones de espectadores que tuvo el piloto hasta los 3 millones que vieron los últimos episodios.
Tim Kring lo ha vuelto a hacer, ha echado por tierra una serie que contaba con una premisa fantástica y maravillosa, creando una serie aburrida y previsible, horriblemente mal cimentada, lo mismo que ocurrió con su otra serie Heroes.
Soy Cristóbal Terrer y estoy licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas. Actualmente trabajo como profesor de marketing y en mi tiempo libre escribo novelas de ficción. Además, presento un podcast sobre cine y realizo fotografías artísticas.