Analizamos el episodio 8×04 de Doctor Who “Listen”
Cuando los fantasmas del pasado y futuro se cruzan en sus vidas, el Doctor y Clara se lanzan en una aventura que les lleva hasta el final del universo.
Capítulo dirigido por Douglas Mackinnon y escrito por Steven Moffat, nos encontramos ante uno de esos episodios de la serie que se alzan entre los mejores que se han emitido.
Los primeros tres capítulos han dado una visión alterada del nuevo Doctor y al aprender con él, sabíamos que llegaría el momento donde se cavara de verdad dentro de su mente y Listen profundiza más que nunca. Steven Moffat es el hombre responsable para uno de los episodios más oscuros, terroríficos e intensos desde Blink y aunque no hay un monstruo categórico, su naturaleza psicológica tiene un ambiente analítico que acompaña el descubrimiento del miedo del Doctor junto a su usual lucha y deseo para descubrir lo extraño.
Dirigido por Douglas Mackinnon, el hombre que nos dio la misteriosa Cold War con el Guerrero de Hielo de la temporada anterior (y dirigirá otros dos más en esta ocasión), el episodio está construido alrededor de la premisa del por qué hablamos con nosotros mismos, incluso cuando sabemos que nadie está físicamente allí y «aquel» con el que estamos hablando, si es que hay alguien. El Doctor de Capaldi se deleita en el lado oscuro del espectro pero no es excesivamente dramático, o buscando intencionadamente por las sombras, se ajusta su 12ª encarnación tan perfectamente y se completa con una sonrisa a lo gato de Cheshire.
Cuando el Doctor decide probar su teoría de que nunca estamos solos y siempre hay algo en la oscuridad, recoge a Clara al terminar una desastrosa cita con Danny Pink (Samuel Anderson). Al traer a bordo su distracción, él le pide que recuerde el sueño que tenía cuando ella era una niña, el que todos tenemos, donde piensas que hay algo bajo la cama y sale para cogerte el pie. En el momento que se ajusta a sí misma en la red psíquica de la TARDIS, Clara está preocupada por una llamada de teléfono y sus pensamientos inmediatamente van hacía Danny Pink y aterrizan, pero ya sabes, no están en el pasado de Clara sino en el de un niño llamada Rupert Pink (Remi Gooding)
El niño está solo y con miedo de algo que no entiende y a la vez que Clara intenta probar que no hay nada de lo que temer, vemos que hay algo definitivamente por lo que tener miedo. Está en las sombras y permanece en la esquina de tu vista, por lo que el Doctor presenta una de las confrontaciones más inexplicables con lo desconocido que he visto en mucho, mucho tiempo.
A lo largo de Listen estarás al borde de descubrir toda una serie de temores que incluyen, ¿qué narices hay bajo las sábanas? ¿Qué (o quién) está llamando tres veces? ¿Por qué Danny cambia su nombre y cual es su pasado? ¿El Doctor en verdad vio quién le golpeó en la cabeza en el DB6– y quién más conoció o dejó atrás? ¿Es esto un empujón hacia el regreso pendiente de Gallifrey y qué final sería? El capítulo además ayuda a explicar el porque volvimos a ese específico granero como el Doctor de la Guerra, es el sentimiento de un refugio seguro y no solo alguna localización al azar. ¡Maldita unión de pistas, Moffat!
De vez en cuando, hay un capítulo que es solo para experimentar y Capaldi continua inspirando con montones de carisma, confusión e intriga, es un cambio poderoso en los engranajes de Who. Jenna Coleman continúa liberándose de esas cadenas de la temporada pasada y Samuel Anderson como Danny Pink, el hombre que siempre dice las cosas mal y tiene una historia misteriosa, se las arregla para encantar a su manera dentro de la burbuja correcta de Clara con honestidad.
Listen es uno de los episodios redondeados más perfectamente y equilibrados que hemos tenido en mucho tiempo, se sigue un bucle sin fisuras a través de lineas temporales cambiantes y se centra en momentos muy relevantes. Está también el hecho de creer que el Doctor no sabe de donde viene su miedo, quien lo controla, y por qué el volvió al granero cuando era lo más importante. Se cimienta el papel de Clara como una chica imposible pero además su papel esencial continúa en la vida de Doctor Who junto a un gran cambio en la dirección. Espero que dejarais una luz encendida…
Soy Cristóbal Terrer director y redactor principal de Seriemaniac. Estoy licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas. Apasionado de la fotografía. También he publicado novelas de ficción y un ensayo sobre series de tv. Presento el podcast Seriemaniac y AfterDark sobre cine.
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