Qué tiene de bueno Star Trek Discovery
Star Trek Discovery es una serie de ciencia ficción ambientada en el Siglo XXIII, en un universo donde diversas razas alienígenas comparten conocimientos a través de una Federación de Planetas, mientras otras prefieren mantenerse al margen para preservar su pureza. De este choque de civilizaciones, y de cómo desembocan en las Guerras Klingon, trata esta nueva serie ambientada en el universo más prolífero de las space opera. Las aventuras de la Nave Discovery se ubican en la línea temporal de Star Trek unos 10 años antes de la serie original (creada en la década de los 60), dando así contexto a las célebres aventuras del capitán Kirk y su primer oficial Spock.
Durante esta crítica sin Spoilers a Star Trek Discovery, como todas las que puedes encontrar en este blog dedicado a analizar series de televisión, trataremos de desmenuzar los puntos fuertes de la series y, aunque las comparaciones son odiosas, ponerla en contexto con la serie original de Star Trek y sus muchas secuelas.
Para abrir boca, diré que los fans de la saga podrán encontrar todo lo que siempre ha caracterizado el universo Trekkie: aventuras, razas alienígenas originales, tanto por su desarrollo estético (que incluye horas de maquillaje y alguna que otra prótesis robótica) como por las características de su cultura; exploración espacial, combates de naves con láser y escudos de energía, tecnología futurista, artes marciales vulcanianas y diálogos en Klingong.
Los no tan versados en este universo podrán disfrutarla igualmente (aunque hay muchos guiños a la serie original, no es indispensable haberla visto), encontrando una serie de ciencia ficción bien construida, de alta calidad, con grandes dosis de imaginación. Además, también encontrarán diálogos y personajes creíbles que se enfrentan a retos físicos llenos de adrenalina, pero también a dilemas morales que les harán replantearse todo lo que siempre han creído cierto sobre las reglas que rigen sus vidas y el universo.
Fiel al espíritu original de Star Trek
En 1966 se estrenó la serie original de Star Trek, en donde la nave USS Enterprise se adentraba en el espacio desconocido para tratar de hallar nuevas civilizaciones y formas de vida inteligentes. Aunque en esta época ya estaban de moda las series sobre el espacio, este visionario equipo de guionistas, con Gene Roddenberry a la cabeza, imaginó un futuro en donde no solo había tecnologías increíbles (móviles, naves espaciales, teletransporte…) o razas alienígenas, sino que el ser humano había superado muchos de sus prejuicios para evolucionar a una nueva sociedad en donde el racismo y el sexismo eran un mal recuerdo del pasado.
Aunque hoy en día no nos sorprenderíamos, la multiculturalidad del reparto de la serie fue todo un shock para la sociedad americana de la época. Poniéndonos en contexto, hay que recordar que en los sesenta, en plena guerra fría, los rusos eran el enemigo, por lo que ver que uno de los protagonistas era de esta nacionalidad (Chekov) fue tan innovador como escandaloso. El personaje japonés (Sulu) no estaba exento de controversia, ya que todavía no habían cicatrizado las heridas de la Segunda Guerra Mundial, y el actor que lo interpretaba era abiertamente gay, lo que infringía numerosas leyes estadounidenses de la época.
Pero sin duda, la mayor polémica fue la generada por Nichelle Nichols (teniente Uhura), que en su doble condición de minoría, como mujer y afroamericana, conmovió a la sociedad de la época, interpretando el papel de un oficial de alto rango y como quinto personaje protagonista. Cabe decir que, cuando se estrenó la serie, hacia menos de un año que los afroamericanos habían obtenido el derecho pleno al voto, y en algunos estados, todavía tenían vetada la entrada a algunos edificios públicos y privados, entre ellos, las universidades.
Es por eso que quizás no muchos se sorprendan al saber que el propio Martin Luther King Jr., líder del movimiento por los derechos civiles de los afroestadounidenses, llamó personalmente a Nicols para felicitarla por su trabajo y pedirle que no abandonara la serie por una carrera más prometedora en Broadway, ya que su presencia en televisión inspiraba a una sociedad que por primera vez veía a un personaje de color realizando un trabajo cualificado, y siendo tratado con igualdad y respeto por sus compañeros blancos. Probablemente el momento de mayor conmoción producido por este personaje fue el beso entre los personajes de Kirk y Uhura durante el capítulo Los hijastros de Platón, pasando a la historia del cine/televisión como el primer beso interracial.
Tras ver los 9 capítulos disponibles de la nueva entrega de la saga, Star Trek Discovery, podemos concluir que son fieles al espíritu de la serie original, ya que hemos encontrado un montón de personajes multiculturales (cabe destacar el guiño al público hispano, ya que el capitán de la nave USS Discovery se llama Gabriel Lorca) cuyo papel no está definido por su género, raza, etnia, acento u orientación sexual.
Star Trek y Feminismo: la última frontera
Aunque seguimos viviendo en un mundo en el que las desigualdades entre hombres y mujeres continúan estando muy presentes en temas como violencia de género, derechos sociales, laborales o salariales (por citar algunos de los problemas del primer mundo; en el resto las cosas están aún peor), la ciencia ficción nos muestra un futuro esperanzador en el que el feminismo ha logrado la igualdad entre hombres y mujeres, y en donde el género del héroe o heroína protagonista no importa. De un tiempo a esta parte, podemos encontrar en las sagas espaciales personajes femeninos protagonistas fuertes, decididos, inteligentes… pero también complejos, tridimensionales y atormentados, con sus defectos y sus virtudes, interpretados por grandes actrices. Por citar algunos ejemplos, recientemente hemos podido disfrutar de las aventuras de Dos (Dark Matter), Dutch (Killjoys) o Rey (Star Wars).
Durante el capítulo piloto de Star Trek Discovery asistimos a un duelo de fuerza, liderazgo y tácticas militares protagonizado por la capitán Philippa Georgiou (interpretada por Michelle Yeoh) y su primer oficial Michael Burnham (interpretada por Sonequa Martin-Green) al más puro estilo de Marea Roja, donde ambas actrices están magistralmente creíbles. Durante el resto de la primera temporada, el hilo conductor de la historia viene de la mano de Burnham. Pero quizás el mayor mérito feminista de la serie no sea colocar a una mujer como protagonista, sino hacer que esto quede tan natural que pierda toda su importancia.
Digna sucesora de la saga Star Trek
Según el Libro Record de los Guiness, Star Trek es la franquicia más prolífera de la pantalla. Contando con las siete series que se han hecho dentro de esta saga (con un total de 31 temporadas y 735 capítulos hasta la fecha), a lo que hay que sumar 13 películas, encontramos un universo rico que ha tenido sus luces y sus sombras, grandes actores y otros no tan grandes, que ha reiniciado varias veces sus líneas argumentales cayendo en numerosas contradicciones e incongruencias, pero que sin duda, ha influido e inspirado a muchísimas personas (desde guionistas a ingenieros, pasando por políticos de primer orden) y ha contado siempre con una legión de fieles seguidores.
Después de que el anterior proyecto para la pequeña pantalla finalizara en 2005, y desmarcándose del reboot dirigido por J.J Abrams que cuenta ya con 3 entregas para el cine, esta última aventura de la Federación de Planetas ha venido para quedarse. El proyecto dirigido por Bryan Fuller (responsable de Pushing Daisies y Hannibal) y Alex Kurtzman (que ha colaborado en infinidad de proyectos, desde Xena a Fringe, pasando por Transformers) cuenta con un buen elenco de actores, una historia prometedora, unos malos carismáticos y todo lo que se puede esperar de una serie de ciencia ficción, que transciende el placer culpable para convertirse en una obra que se puede recomendar abiertamente sin temor a que te miren luego como si fueras un puto friki.
Si os habéis animado a verla, aunque está realizada por la CBS, podéis encontrarla en Netflix. Buen viaje por las estrellas, y por favor, comentadme qué os ha parecido el artículo y la serie. Un saludo vulcaniano para todos los lectores de Seriemaniac.
Podcast sobre Star Trek Discovery en nuestro canal de Ivoox
Tráiler subtitulado Star Trek Discovery
Soy Cristóbal Terrer y estoy licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas. Actualmente trabajo como profesor de marketing y en mi tiempo libre escribo novelas de ficción. Además, presento un podcast sobre cine y realizo fotografías artísticas.
Me has despertado la necesidad imperiosa de verla. Ya comentaré que me parece la serie. La crítica, sobresaliente
Muchas gracias José Rafael; espero que la disfrutes. Ya me dirás que te ha parecido.
He leído a mucho trekkie cabreado con la nueva serie, sinceramente después de haber visto TODAS las franquicias y películas debo decir que esta junto con Deep Space y la serie original han sido las únicas que NO han terminado aburriéndome. Las demás sin excepción muestran un universo demasiado aburrido y de cartón piedra, excepto buena parte de La Nueva Generación aunque esta adolece de tropecientos capítulos de relleno en la holocubierta o viajando al pasado.
Estoy totalmente de acuerdo contigo; ¿a que viene tanto hater? Creo que Star Trek Discovery es una gran entrega a la altura del legado de la franquicia, que respeta los cánones de este universo llevándolo a un nuevo nivel, sin nada que envidiar a otras space operas actuales de alta calidad. Muchas gracias por comentar.