Análisis de la serie alemana Dark de Netflix
Winden, Alemania. La pequeña localidad boscosa alemana de Winden es el escenario donde se construye la serie DARK, una producción europea que ya comparan en éxito y calidad con ‘The Revenants’. Netflix sigue siendo una garantía de entretenimiento y brillantez en lo que a series se refiere, y esta serie es una muestra más de ello.
Serie Dark: Las comparaciones son odiosas
Si suprimimos el ambiente claramente ochentero por uno más sutil, todo matiz cómico y le sumamos un lustro a los protagonistas juveniles, a priori podemos encontrar ciertas similitudes narrativas y estéticas con la afamada serie de Netflix, ‘Stranger Things’, o incluso con el largometraje de J.J. Abrams, ‘Super 8‘; pero es algo que se va diluyendo a medida que se suceden los capítulos, ya que el motivo y la trama son bien distintos.
Aún así, algún nexo existe, como el ambiente siniestro, fantástico, tétrico y sobrecogedor de este tipo de series que están cautivando a medio mundo. Es evidente que esta fórmula no va nada mal hoy día, pero no, no es un burdo copia y pega de ‘Stranger Things’. No obstante, si te gustó la una, posiblemente también lo haga la otra. Ahora bien, en los planos, el tipo de rodaje y narrativa se puede percibir una atmósfera atenazadora, sombría y asfixiante al más puro estilo ‘Seven’ o la serie ‘OA’. Luego está la inquietante utilización del sonido y las escenas sorpresivas que recuerdan a filmes como ‘El resplandor’, ahí es nada. Pero al margen de toda comparación, DARK es un producto que sobrevive por sí solo.
Series europeas de Netflix
Ahora bien, ¿qué hace que una serie tenga un efecto inmediato de interés en el espectador tras su primer capítulo? Es difícil hallar una respuesta certera y universal a esta pregunta. Tal vez todo atienda a factores que tengan que ver con el momento social, las tendencias o la repercusión que sea capaz de darse a sí mismo un producto. Con todo, hay ingredientes que no deben faltar en una producción para que tenga, además de una aceptación popular, una buena crítica colateral.
En el caso de la serie DARK, de partida encontramos que es la primera producción alemana de Netflix. ¿Qué significa esto? Pues que sin duda nos aseguramos profundidad en los personajes, en las subtramas dramáticas y en esa forma introspectiva que tiene los europeos para contar las historia, con calma, meticulosidad y poesía narrativa; algo que dista mucho de los americanos, con su vertiginosa y trepidante tendencia a la acción y al espectáculo visual.
Luego encontramos que es una serie recientemente estrenada, con una sola temporada, y que combate con los sempiternos éxitos de taquilla seriéfila como Vikings, Walking Dead, The Killing, Breaking Bad, etc… como una más. Se ha hecho hueco por su calidad narrativa y su depurada estética sin necesidad de llevar mucho tiempo en pantalla para demostrar que todo el mundo quiere y puede verla. Eso sí, Netflix ha confiado en el producto a tenor de la acogida y se renueva oficialmente la segunda temporada, que se estrenará en 2019.
Crítica sin spoilers
Dicho esto, para terminar esta crítica de la serie dark, decir que es fácil agarrar al espectador cuando planteas a través de una excelente fotografía e iluminación un entorno y paisaje sórdido, abandonado, desolador, angosto y que juega a las mil maravillas con el drama y la intriga. Lluvia, niebla, frío, grises, oscuros y bosques hacen que la tensión de los músculos sensoriales estén siempre en constante ritmo y que los cincuenta minutos pasen verdaderamente rápidos, pero sin prisa. De esas series que apetece ver a oscuras, con una taza de café caliente a un lado y el regazo de tu pareja al otro.
Pero por si fuera poco, el guión se ha encargado de hacer posible que el espectador sea partícipe de la creación de la trama consiguiendo absorberlo a cada minuto con esa sutil y certera forma de presentar paulatinamente la trama, a los personajes y de interrelacionarlos entre sí. Y es aquí donde está la clave de la serie. En la relación entre los personajes y en la relación entre el presente, pasado y el futuro, que como dijo Einstein, son conceptos ilusorios.
Conclusiones
El creador, Baran bo Odar se ha rodeado de multitud de caras aparentemente desconocidas o poco mediáticas, rehusando la tendencia actual en las series para dar más empaque a la producción, pero ha atinado perfectamente en la elección de cada actor y actriz para los personajes.
Y de nuevo, recurrimos a la ciencia ficción y a los elementos fantásticos para crear más expectación aún. En DARK se han introducido con tacto. Una central nuclear, paradojas especio temporales y unas misteriosas cuevas son los escenarios en donde con audacia los creadores colocan los cliffhangers, los flashback y los giros argumentales que pesarán a la postre sobre el verdadero drama principal, los secretos entrecruzados de las familias Kahnwald, Nielsen, Doppler y Tiedemann, que desde el minuto uno ya empiezan a ser sospechosos y adictivos.
Por todo ello, DARK es una serie altamente recomendable que está ganando en popularidad y que no tardará en extenderse como una de las mejor valoradas de 2018.
Tráiler subtitulado de la serie Dark
Soy Cristóbal Terrer director y redactor principal de Seriemaniac. Estoy licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas. Apasionado de la fotografía. También he publicado novelas de ficción y un ensayo sobre series de tv. Presento el podcast Seriemaniac y AfterDark sobre cine.
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