Análisis de la serie Historial delictivo
Siempre es motivo de atención el estreno de una nueva serie policíaca, uno de los géneros más celebrados entre los lectores de nuestro blog y oyentes de nuestro podcast de series. Hoy le toca el turno al análisis de la serie Historial delictivo de Apple TV+.
Cada vez que se estrena una nueva ficción policíaca debemos buscar algún elemento diferenciador. Se estrenan cientos de series de este género, por lo que debemos encontrar un factor original para aproximarnos a ella.
Plataformas como Netflix se han especializado en este tipo de series. Algunas de producción propia —la mayoría pertenecientes a otras productoras extranjeras (especialmente europeas) las cuales son distribuidas falsamente como originales de la plataforma roja—.
Europa se ha colocado como una de las zonas punteras en la producción de este tipo de productos. El casi oximorón conocido como nordic noir literario se ha trasladado a la pequeña pantalla con un cierto grado de éxito y garantía de calidad mínima.
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En el caso de la serie Historial delictivo, el punto diferenciador lo encontramos en la relación entre la pareja de inspectores protagonista. Una lucha frenética y a contrarreloj por las calles de un Londres actual.
Un antiguo caso unirá los destinos de ambos policías: la detective June Lenker (Cush Jumbo), una joven talentosa, llegará a un caso de violencia doméstica casi por casualidad, a raíz de una llamada anónima que la hará sospechar de la resolución de un antiguo caso que condenó a una persona. La llamada pone sobre la mesa la posibilidad de que se produjera una falsa acusación en la investigación, por lo que el condenado, de raza negra, quizás pudiera ser inocente.
Esta investigación de un caso antiguo, el cual fue cerrado con ciertas irregularidades, llevará a Lenker a chocar frontalmente con el agente responsable del caso: el detective Hegarty (Peter Capaldi): un viejo sabueso que cuenta con gran renombre dentro del departamento policial, cuyos métodos son, cuando menos, dudosos y rozando la legalidad.
Así pues, tenemos dos policías enfrentados con la sospecha de que Hegarty y su equipo han estado empleando técnicas policiales cercanas a la corrupción. Un policía que podría estar al otro lado de la ley, algo que ha funcionado muy bien en otras series como The Shield o Line of Duty.
De hecho, la serie recuerda a otras series policíacas británicas producidas por la BBC, Channel4 o ITV.
Pese a lo manido de que una ciudad sea un personaje más en la serie, en este caso, los propios productores lo han verbalizado en varias entrevistas. En Historial delictivo encontramos un Londres actual, el cual muestra la convivencia de diferentes culturas, religiones y clases sociales: lo que pone de manifiesto problemas profundos relacionados con la xenofobia, machismo y la violencia doméstica.
Especialmente, la serie pone de manifiesto el cinismo policial en la búsqueda continua por resolver casos de cualquier forma, con el único objetivo de cerrar expedientes y engordar las estadísticas de éxito policial. Algo como lo que hacía el bueno de McNulty en The Wire (se inventó un falso asesino múltiple para mediatizar la investigación, consiguiendo financiación para luchar contra otros casos realmente importantes para él).
El showrunner es Paul Rutman, el cual ya se acercó al género en series notables como Vera (2011). La dirección recae en la mayoría de los episodios en Jim Loach, otro asiduo al thriller policíaco como en su incursión en la serie La torre (HBO).
Ambos construyen una serie interesante, de tono sombrío y riguroso. Centrada en los personajes y su tormentosa relación, dejando un tanto de lado el clásico Whudunit —que nos lleva a plantearnos quién es el asesino real de ese antiguo caso—, el cual suele ser el elemento principal sobre el que pivotan las tramas en otras series.
Desde luego, el punto más atractivo es el duelo de la pareja protagonista, interpretada por el veterano actor Peter Capaldi (el Doctor Who número doce) y la actriz Cush Jumbo (a la que vimos en la serie The Good Wife y su spin-off The Good Fight). Ambos sublimes y brillantes en unas interpretaciones llenas de matices.
La serie de Apple TV+ cuenta con 8 episodios con vistas a una nueva temporada. La parte principal de las tramas quedan cerradas pero es cierto que algunos elementos quedan abiertos a una posible continuación.
